En el año noventa y tres aún era virgen y
mi padre se había jubilado.
La vida era complicada con catorce años.
Miope, astigmática y con sobrepeso.
Keep the faith, lord we got to keep the faith.*
Hortensia, la amiga de mi hermana Rosi, era
rubia teñida, alta y fan de Spandau Ballet.
Además de insulinodependiente.
Fue un faro en mi vida. Una tabla de salvación en
la que hincar mis uñas para poder emerger de la
hiedra podrida que crecía a mis pies. Ese día me
llevó a un concierto de una banda de rock.
La luz se apagó. Una melena rubia con pantalones
ceñidos salió al escenario. Los primeros acordes
sonaron y Richie empezó a hacer gemir a una
belleza de seis cuerdas.
Keep the faith, lord we got to keep the faith.
Esa noche llegué tarde a casa y no fui ni miope,
ni astigmática ni gorda. Tenía catorce años y aún
pasaría mucho tiempo hasta llegar a la
primera sesión de quimio de mi madre.
Ese día, tenía catorce años y fui a un concierto de
Bon Jovi.
*Letra Keep the faith- Bon Jovi.
Me encanta la primera frase, te lanza al relato.